El proyecto Aularios surge de un concurso público de Anteproyectos organizado por la Universidad de Chile, cuyo objetivo fue obtener el diseño de un prototipo de edificio de aulas, que fuese capaz de resolver una carencia en infraestructura educacional, que en su repetición, permitiera ordenar desde lo formal la heterogeneidad de edificaciones existentes en el Campus Juan Gomez Millas, además de dar solución al creciente aumento de matrículas de las diversas facultades que lo habitan.
Se propone así un módulo repetitivo. Un artefacto "palindrómico", sin espaldas, que logra relacionarse armónicamente con los edificios existentes y se integra al espacio público del Campus sin interrumpir los recorridos existentes.