El espacio médico lo encuentro un tanto especial y delicado, porque la solución o vivencia de dicho espacio tiene distintos matices. Es un lugar de trabajo, de espera, estancia, de esperanza, donde se yuxtaponen sentimientos encontrados. Por lo que el ambiente, la percepción del espacio se vuelve multifacético.
El proyecto se ubica en una de las avenidas más importantes de la ciudad, un eje que conecta tres municipios y se convierte en ambos extremos en carretera. siendo esta una localización privilegiada, además por las avenidas que desembocan y conectan con este eje, que a su vez multiplican las posibilidades de accesibilidad.
la propiedad tiene 700m2 de superficie y un desnivel de 3.00m hacia abajo del nivel de calle. para sacar el máximo provecho tanto por su ubicación como al propietario, se decidió por un edificio de 9 niveles (2 estacionamiento + 7 consultorios)
La orientación no le ayudaba, porque el frente se dirige hacia el sur - poniente. son las caras más castigadas en asoleamiento. por el contrario son las mejores vistas que se puede tener en la ciudad. Hacia el Sur se encuentra el cerro de la silla (característico e identidad de la ciudad) hacia el sur-poniente esta la sierra madre y hacia el poniente se alcanza a ver la Huasteca.
Esta multiplicación de bellezas naturales y el querer verlo todo, nos llevo a la fachada dinámica que se está proponiendo. no podíamos limitar la vista a una sola dirección, porque las 3 eran extraordinarias. la solución fue ir girando la fachada del edificio conforme se iba elevando, haciendo un giro de 45° en su totalidad. lo cual permitía dos cosas. 1. el aprovechar todas las vistas y 2. que cada piso tuviera una vista distinta y fuera única. es dinámico, el espacio tiene remates distintos y le da un carácter especial a cada piso.
Lo especial del proyecto, es que la estructura portante se mantiene completamente estática a pesar del movimiento del cuerpo del edificio. Cuando una persona recibe un tratamiento médico, sufre transformaciones tanto internas como externas, independientemente del tipo de padecimiento; sin embargo la estructura del individuo, sigue siendo la misma. Es algo que podemos aplicar de manera generalizada, a lo largo de la vida vamos teniendo alteraciones que nos cambian de rumbo o dirección, sin dejar de ser nosotros mismos.
Esto nos conduce a la analogía de la estructura principal del edificio y la piel que lo rodea. La estructura permanece rígida, racional en todos los niveles del edificio, por el contrario, la piel que lo cubre va sufriendo cambios constantes, que en ocasiones permite que se vea la estructura y en otras permanezca oculta, está en constante cambio. Aunado a esto, la fachada del edificio que es de cristal en un 80%, esta modulada en rectángulos que algunos son ciegos y de distintos colores, lo que otorga mayor diferencia entre los niveles de la construcción.
La piel del edificio es una dualidad transparente-ciega
La composición volumétrica está dividida en dos cuerpos. uno 100% estático, donde están los servicios y escalera de emergencia. y el volumen dinámico que es en un 70% de cristal (frente y ambos lados) y la parte posterior es ciega.
la fachada acristalada está compuesta de módulos triangulares que permiten las formas onduladas sin necesidad de utilizar vidrios curvos. pero debido a su constante exposición al sol, se utilizan películas que van desde un grado 20% hasta un 100% de opacidad. dependiendo del espacio que se trate, es el grado de transparencia. eso ayuda a mitigar el calor al que está expuesto y estéticamente le añade un valor dinámico a la piel del edificio.