El proyecto se plantea desde el hallazgo de una gran oportunidad: Educación y naturaleza. Un paisaje para las primeras experiencias. Un lugar donde descubrimiento del medio provenga de la relación particular del niño con lo natural. Un paisaje usable, donde lo natural cualifique los primeros años de vida de los niños. Se proyecta un recinto donde las diversas actividades educativas se sitúan en contacto directo con la vivencia y observación del paisaje y del crecimiento de elementos naturales, convirtiéndose éstas en parte fundamental del aprendizaje y de los escolares.Así pues el proyecto se concibe desde una vinculación indisoluble entre arquitectura y paisaje desde una doble relación topológica: Por un lado, se proyecta una relación con el paisaje lejano, en un afán por atrapar el horizonte de Palma. Esta relación condiciona la implantación del edificio en la parcela. El proyecto se configura con planta de “U” abierta orientada hacia las vistas lejanas y elevada sobre el nuevo parque colindante, poniendo en valor la diferencia de cotas que los separa y rodeando un patio mirador alrededor del cual gira el proyecto.Por otro lado, se proyecta una relación con la naturaleza cercana. Esta relación condiciona la materialización del proyecto, en el afán por conseguir el máximo rendimiento. La edificación se desvincula intencionadamente de los linderos, produciendo bolsas de espacio que se configurarán como un jardín perimetral. Este jardín, cualifica los espacios interiores en una estrecha relación entre interior y exterior, construyendo horizontes cercanos a los cuales se expande.Se diseña un edificio y un jardín indisolubles pensados para observar el paisaje del parque cercano y entablar un diálogo continuo y directo entre los espacios interiores y los espacios exteriores del centro. En lo relativo a lo funcional, la propuesta se desarrolla en una única planta, con el fin de dotar de accesibilidad universal y una mayor expansión y contacto directo con los jardines proyectados. Se constituyen tres bloques de programa agrupando las diferentes unidades: aulas de bebés por edades, aulas comunes y apoyo, y personal del centro. Estos conjuntos conforman un volumen de tres lados en forma de “U” abierta orientada hacia las vistas del horizonte y sobre el parque colindante de nueva creación. Los lados de la “U” se giran respecto a los linderos, buscando las orientaciones óptimas para los usos que albergan: sureste y suroeste para las aulas, noroeste para el área de personal del centro.A su vez, los giros de las fachadas respecto a los linderos, generan bolsas de paisaje que articulan el jardín perimetral continuo. La disposición de los accesos fragmenta, la totalidad del jardín en tres zonas que coinciden con las orientaciones de los módulos edificados. Se proyecta para cada una un ambiente exterior específico: el jardín amarillo frente a la fachada sureste y de mediodía, el jardín rojo frente a la fachada suroeste y del atardecer y el jardín azul frente a la más sombría fachada Norte. Esta agrupación cromática del jardín permite agrupar un gran número de especies vegetales autóctonas y potenciar su identidad.La colocación de los usos es estratégica: El área de personal está ligada a un acceso rodado independiente para el tráfico de mercancías y residuos, el área de aulas comunes frente al acceso principal permite el acceso directo a las mismas y su utilización fuera del horario escolar, el área de aulas de bebés y niños agrupados por edades está situada frente a sus extensiones exteriores. Estas tres áreas albergan y delimitan el patio de recreo frente al paisaje y el vestíbulo frente al acceso del centro. El acceso público se configura entre el bloque de aulas por edades y el de aulas comunes, liberando el contacto entre bloques que se construyen estrictamente rectangulares. De igual modo, el acceso privado, se produce entre los bloques de aulas comunes y de personal. Ambos accesos confluyen en un vestíbulo común.La forma del edificio es compacta lo que reduce y optimiza la superficie destinada a circulaciones y favorece la vigilancia y seguridad del centro. Además, la agrupación programática en diferentes crujías y el acceso directo reduce el desplazamiento de sus usuarios. Para la construcción del centro se ha proyectado un sistema de construcción modular y económica y se han elegido materiales de fácil localización y puesta en obra. La estructura es regular, los acabados resistentes y las carpinterías interiores y exteriores modulares.Los cerramientos se construirán de doble hoja. Se proyecta una piel específica constituida por una celosía permeable de lamas verticales que protege de la radiación solar directa y posibilita la máxima apertura a los jardines perimetrales. Esta celosía se resuelve con piezas cerámicas de tradición local. Una misma pieza en forma de lama vertical ha permitido resolver los diferentes requerimientos de la fachada: protección solar del vidrio y del propio muro para conseguir una temperatura de confort en los días más calurosos y apertura de grandes huecos en las aulas para el máximo aprovechamiento de la luz solar. Además, la repetición del mismo elemento reduce costes y ofrecerá imágenes cambiantes y diversas para las mismas fachadas.