con Manuel Cerdá Pérez
Proyecto casa 3x3, Requena.
Existen dos tiempos, el más perenne o “ruina” y el más caduco o “habilitador”:
La vivienda se entiende como una agrupación de “cajas-ruina” afuncionales que se disponen siguiendo los criterios “atemporales” y generando distintas situaciones. Los criterios que se han seguido son: las orientaciones, las conexiones, gradación de privacidad, circulaciones, vistas largas, relación con espacios exteriores.
Se configura siguiendo los cánones destilados y probados a lo largo del tiempo, patrones.
El baldaquino es un elemento espacial 3d que cierra o define cubos ligeros en diferentes posiciones de la casa, completando la ruina. Las ruinas en reverso muestran la integridad de un edificio que está incompleto o en estado de permanente transformación. Estructuras ligeras, lineales, crean esta sensación, que parte de una regularidad asumida.
Posteriormente, el usuario, con la estrategia del cangrejo ermitaño, "habilita" los espacios con instalaciones menos duraderas. Como si estuviéramos rehabilitando, conquistando, hoy, nosotros, un edificio preexistente, intemporal, un palacio renacentista o una casa de pueblo de piedra.
"Y me viene a la cabeza la idea de que estamos haciendo en este proyecto una casa para el siguiente cliente a éste, realmente. O al siguiente del siguiente, y así infinitamente, casi como un cuento Borgiano. Estamos haciendo, como también bien dice Oriol Fogué, “ciencia ficción”. El arquitecto siempre intenta siempre definir científicamente algo que nunca sabe cómo va a ser ni qué vida va a tener. Situaciones futuras, es decir, ficticias."